A Nebrera le tienen ganas

Hoy leo que a Monserrat Nebrera, la diputada catalana que se mofó del acento de la ministra, le van a abrir un expediente en el PP (sus propios compañeros!). Además, los del PP del sur, los que llevan años jartandose a perder elecciones incluso han pedido que la echen del partido.

Primera reacción: "joder, qué bien, ¿no?, por fin en un partido político se deja a un lado el corporativismo y se sanciona a quien ha hecho algo mal o ha dicho cosas que van contra de lo que el partido considera que es la ética del debate político".

Segunda reacción: "uhmmmmmm qué raro....., otros han dicho burradas más grandes o parecidas y no les ha pasado nada...."

Y es que resulta que la tal Nebrera es un pececillo díscolo dentro del Partido Popular en Cataluña, lo que técnicamente se vendría en denominar "un grano en el culo". Así que la ocasión viene ni que pintada para ajustar cuentas.

En "El Intermedio", el programa de Wyoming en La Sexta, había una sección que se titulaba "Animales hijos de p...", en la que se glosaban las conductas de determinados animalillos especialmente cabrones con sus congéneres o con los de otras especies.

El ser humano podría perfectamente haber formado parte de esta sección, pues somos animales auténticamente hijosdepu... Los políticos, que en general son seres humanos, son también bastante hijosdepu... y no dudan en merendarse a sus congéneres cuando la ocasión lo requiere. Bien es cierto que la mayoría del tiempo lo dedican a machacar a los de los otros partidos, pero no lo es menos que con uno de los de dentro la cosa debe de tener un encanto especial.

En toda esta historia de Nebrera y sus cuitas con el partido no tengo muy claro quien es más hijodepu... Los compañeros de partido parecen un poco hijosdepu... o cuando menos bastante hipocritillas, y a Montserrat no la he seguido mucho, no sé si será muy hijadepu.... pero seguro que también tendrá lo suyo. Lo que si está claro es que la ministra no sabe hablar. Porque independientemente del acento (que a mi no me impide la comprensión), es cierto que hay que hacer verdaderos esfuerzos por entenderla.

Es de esas personas a las que parece que las ideas les duelen cuando las verbalizan, como si estuvieran estreñidas. Por tanto pronuncian palabras y componen frases porque saben que no les queda más remedio, que aquello tiene que salir antes o después, como sea, pero el proceso del lenguaje se convierte para ellos en un vía crucis lento, doloroso y penoso.

Nebrera dice: "Esta buena mujer [Magdalena Álvarez] tiene un problema y es que tiene un acento que parece un chiste, tiene un problema de comunicación, que se aturulla y hace un lío". Por lo del acento la van a crucificar, por el resto de la frase deberían darle un premio.